Resumen:
La comunicación interventricular (CIV) es la cardiopatía congénita más frecuente. El defecto puede variar desde un pequeño orificio en el septum muscular, con una buena posibilidad de cierre espontáneo, hasta lesiones complicadas que requieren cirugía abierta. Solo el 30 a 50% de las CIV requieren de cierre quirúrgico y el resto puede presentar cierre espontáneo. Sin embargo, existen pocos estudios de seguimiento con datos de cierre espontáneo, tratamiento y sobrevida de este defecto. El objetivo de este estudio fue determinar la evolución natural de la CIV, en especial el cierre espontáneo del defecto y su relación con las características clínicas y ecocardiográficas en los niños menores de 16 años atendidos en el Servicio de Cardiopediatría del Centenario Hospital Miguel Hidalgo. Se analizaron 74 pacientes. La CIV perimembranosa fué la mas frecuente, seguida de la muscular trabecular, de la muscular de entrada y de la muscular de salida. La incidencia de CIV subarterial fue baja, al igual que la insuficiencia aórtica y el prolapso aórtico. Casi la mitad de los pacientes persistieron con un defecto grande que requirió de corrección quirúrgica, una cuarta parte tuvieron cierre espontáneo y en la otra cuarte parte el defecto se redujo o se mantuvo muy pequeño con Qp/Qs de 1.
La presencia de signos y síntomas de insuficiencia cardiaca y de cardiomegalia fueron frecuentes (72 y 70% respectivamente), y las posibilidades de cierre disminuyeron cuando el cuadro clínico era mas florido. La gran mayoría de los pacientes (92%) tuvieron un solo defecto, solo 4 pacientes tuvieron 2 o más defectos, por lo que no es posible realizar conclusiones en cuanto a su relación con la posibilidad de cierre espontáneo. Así mismo, hubo muy pocos pacientes con prolapso aórtico e insuficiencia aórtica. El cortocircuito medido con el primer ecocardiograma fue grande (Qp/Qs >1.8 a 1) en el 75% de los pacientes y esto ser relacionó con mas posibilidades de requerir cirugía posteriormente. Los defectos asociados mas frecuentes fueron el conducto arterioso y la comunicación interatrial, su presencia se asoció a menos posibilidades de cierre espontáneo, sin embargo esto pareció depender mas bien del tamaño de la CIV a que se asociaban estos defectos. En el 23% de los pacientes en que se determinó la presión pulmonar con el primer ecocardiograma esta fue mayor a 60 mmHg. Seis de los 7 pacientes con hipertensión pulmonar requirieron cirugía. Al contrario de lo esperado, la presencia de tejido de cierre y el síndrome de Down no mostraron asociación con la posibilidad de cierre espontáneo.